5 Lecciones aprendidas de nuestro primer año construyendo un startup
Constantemente hago el ejercicio de decirme a mí mismo —Si tuviera que volver a iniciar Avify desde cero, definitivamente haría esto de una manera muy distinta — y es que el camino es tan complejo, que entre más va creciendo tu compañía, más variantes entran a la ecuación y hay algunas cosas que me hubiese encantado saber al inicio de esta maratón que hoy quisiera contar.
Estas son las 5 lecciones que aprendí en estos primeros 15 meses construyendo Avify con nuestro equipo.
1. El generalismo es tu arma más valiosa
Absolutamente todo lo que debe suceder para que la compañía valide el producto y venda sus primeras suscripciones, lo debe llevar a cabo el equipo de fundadores.
No existe nada mágico que de un día para otro deje tu contabilidad lista, construya tu página web, recopile información de tus usuarios, resuelva temas legales o haga tus correos de prospección (tal vez en el futuro Chat GPT lo haga, pero ahorita no).
La razón más clara de por qué esto debe ser así, es porque mucho de lo que sucede en los primeros esfuerzos por formar las bases de la compañía, es la primera vez que se hace, y sumado a esto tampoco es muy claro si realmente funciona porque tu producto aún está en una modalidad de validación, tal vez aún estás definiendo quién es tu cliente ideal y delegar eso a otras personas en los primeros días, solo constituye un gasto de caja chica que luego puede ser muy doloroso.
En nuestro caso nos sucedió que contratamos personas que no necesitábamos en un momento muy temprano, para hacer cosas que aún no funcionaban o no habíamos experimentado correctamente.
Mi recomendación de esta lección es:
Intentar que el equipo fundador cubra todos los puestos posibles por el máximo de tiempo posible, haciendo la mayor cantidad de experimentos que permitan validar el producto y obtener los primeros clientes que paguen. Posteriormente contrata especialistas para ir delegando las labores más estables del día a día.
2. Todo tarda mucho más tiempo del que se cree
Si bien el concepto de startup define que es una compañía que tiene el potencial de escalar rápidamente, no se puede escalar un producto si no ha conseguido validación y ventas de forma sostenida.
En los primeros días, se tienen muchas hipótesis que hay que ir a probar con clientes reales que estén dispuestos a pagar.
Conseguir que tus primeros usuarios sientan interés por resolver un dolor utilizando tu producto, que les parezca justo el precio que estás cobrando y que quieran realmente pagar después de una prueba gratuita; puede tomar muchos meses y muchos cambios, antes de poder dar signos de que existe un producto que puede comenzar a escalarse.
La mayor parte de los resultados que se obtienen en los primeros días pueden dictar que tus precios son muy bajos, que te falta definir un nicho, que tu producto aún tiene muchos errores para atender cierto tipo de cliente y que tal vez le estás vendiendo a un cliente que no es el ideal para crecer y permitirle tracción a tu compañía.
Mi recomendación de esta lección es:
Define tu BHAG: Big Hairy Audacious Goal, es decir el objetivo más grande, descabellado y audaz para los próximos 20 años y proyecta tu visión en esa perspectiva. Entiende que le estás vendiendo a personas que tienen necesidades, que tienen ciclos de trabajo y que el 100% de tus primeras ventas se construyen con relaciones, y eso requiere un trabajo constante de ayudar a tus usuarios a crecer y solventar problemas. Ninguna ronda de inversión o interfaz gráfica, va permitir que tu startup crezca, sino hay mucho tiempo dedicado a crear relaciones y escuchar a los clientes.
3. Levantar capital es la tarea más difícil que vas a hacer como CEO
El capital de riesgo es un componente común en casi todas las startups, y conseguirlo es un proceso altamente demandante y complejo que nadie nos enseña.
Levantar capital requiere que el CEO pueda construir relaciones con personas clave de fondos de capital de riesgo interesados en invertir en etapas tempranas, y esto toma mucho tiempo y requiere contar cientos de veces una excelente historia sobre cómo el equipo de fundadores encontró el dolor que están buscando solucionar, cómo se han obsesionado con solucionarlo y por qué es el equipo adecuado para hacer que esa gran visión se convierta en realidad.
Dentro de la complejidad del levantamiento de capital, lo que personalmente ha sido más demandante, es el trabajo mental que hay que hacer para mantenerse firme y cuerdo, después de recibir una tonelada de respuestas negativas de muchos inversionistas que te invitan a generar más tracción y validación, antes de considerar una inversión en tu startup.
Mi recomendación de esta lección es:
Construye la mejor historia que permita contar cómo el equipo de fundadores encontró un problema por solventar y desarrolla un deck que sea fácil de leer y entender. En etapas tempranas los inversionistas tienen los ojos puestos en el equipo detrás de la compañía, en la historia y en la propuesta de valor del producto que se desea construir.
Es importante enviar correos de actualizaciones a tus potenciales inversionistas, contarles de forma transparente lo que se ha descubierto y el proceso que los fundadores están llevando para adquirir clientes, hacerlos pagar y retenerlos en el tiempo.
Preparar la mente para recibir muchas respuestas negativas y aferrarse a la visión y la razón de ser de la compañía, va permitir que el proceso de levantamiento de capital sea más llevadero y constante.
4. Sin un cuerpo y una mente saludables, todo es una bomba de tiempo
Varios estudios mencionan que los fundadores de startups tienen el doble de riesgo de sufrir depresión y ansiedad, y tres veces más riesgo de abusar de drogas.
La forma en que el generalismo, el levantamiento de capital y la lucha constante por alcanzar una validación de mercado que haga que la compañía genere tracción, puede tener consecuencias desastrosas.
Cuando los niveles de estrés y caos son altos, y no hay un balance bien establecido en la salud del cuerpo y de la mente, es muy fácil perder el control de las cosas, perder interés por los detalles y comenzar a pensar en escenarios drásticos.
En lo personal durante el 2022, viví una montaña rusa de emociones de forma muy rápida y agresiva, lo que me llevó a varias crisis de ansiedad y depresión que afectaron mi salud y por poco la de la compañía, por falta de balance en mi actividad física y descanso mental.
Mi recomendación para esta lección es:
Si los fundadores están bien física y mentalmente, la compañía va estar mejor.
Define rutinas para ejercitarte, meditar, despejar la mente y tener tiempo para pensar. Algo que siempre recomiendo es hacer afirmaciones todas las mañanas, visualizar y pensar de forma constante que todo el esfuerzo que se está haciendo hoy, es un efecto compuesto que permitirá ir construyendo un camino hacia la estabilidad y el crecimiento en el tiempo.
Nunca dudar en buscar ayuda con profesionales, mentores e inversionistas que puedan dar consejo en los días oscuros y complicados.
5. Necesitas un equipo de trabajo que piense a largo plazo
Por último y no menos importante, el camino de la construcción de un startup es altamente demandante, es muy solitario para los CEOs y es prácticamente una labor imposible si no se cuenta con un equipo que comparta la visión a largo plazo.
En los primeros días de tu compañía, consigue fundadores generalistas, obsesionados con resolver un problema y ayudar a los clientes, y que no piensen en convertirse en millonarios de la noche a la mañana.
Los equipos que se mantienen unidos, aprenden de los experimentos y crean estrategias en conjunto alrededor de las necesidades de los clientes, son los que persisten y sientan las bases de un startup de alto desempeño.
Mi recomendación para esta lección es:
No hay una receta secreta para conseguir un equipo comprometido con una visión a largo plazo, pero sí es posible atraer personas que te complementen si como CEO cuentas tu historia en tantos lugares como se pueda (LinkedIn es mi mayor recomendación).
Como CEO vas a estar el 100% del tiempo contando tu historia, hacerlo de forma constante en espacios donde hayan otros emprendedores permite que tu visión llegue a oídos de las personas ideales, que puedan compartir y alinearse a tu BHAG y que puedan convertirse en tus mejores socios y en tus primeros colaboradores.
Gracias por llegar hasta acá, nos leemos la próxima semana.
Peter
